De Tv Blanco y Negro a TV a color

Entrevistamos a hombres y mujeres para hablar del ciclo femenino... ¿qué dicen ellos? ¿cómo nos sentimos nosotras?....

Pd: Vale aclarar que el habla de su novia, que no es ella. Y ella... bueno creo que ella habla por todas.

Un garrón

Menarca: la primera

-¡¡Hay ella se hizo señorita, ya sos toda una mujer!!
- He??
La frase estalló en mi cabeza y me quedó dando vueltas varios días, - ¡que asco! y lo decían tan felices... que vergüenza.
A mi amiga le vino... ¡y con nueve años!
El tío le regaló un ramo de flores, malísimooo, como le van a contar al tío!!!
Yo me muero que mi tío lo sepa. Me muero ir a comprar toallitas al supermercado, todos van a saber que estoy indispuesta.
-"Que ya sos una mujer hecha y derecha"... que ridículo!
Con razón mi amiga hace rato que usa corpiño. Antes era la más baja del grado y ahora nos pasó a todas y le crecieron las lolas.
A otra compañera, a la que también le vino, le preguntamos cómo era y nos dijo -te sentís "pastosita", - dijo pastosita, que ascoooo!!!
Mi mamá me contó que le vino a los 13 y que, generalmente, a las hijas les viene a la misma edad, bue todavía me falta...
Pero ni loca le cuento a mi tío.

¿Cómo fue tu primera menstruación?

Estoy indispuesta... ¿para qué?

Indispuesta para hablar de cosas que no me importan, para ruidos molestos y palabras sordas. Indispuesta para críticas, quejas y susceptibilidades, para peliculas, novelas y canciones melosas. Indispuesta para disimular.

Dispuesta a ser menos diplomática, más franca, más frontal. Dispuesta a sacar conclusiones de la vida, a hacer terapia con la escoba, el terapeuta, un gato, una amiga o leyendo una revista en el bar de la esquina, mientras analizo como hizo Pampita para volver a su peso 30 días después de ser madre, a la par que prometo no comer más medialunas.Pero están tan ricas y el café tan justo y esa esquina tan contenedora,que no es que vaya a romper la promesa, es que directamente nació rota.

Dispuesta a escribir, a decir lo que pienso. No hay mejor carta de furia que la que uno escribe indispuesta. Es tan clara, tajante, mordaz y puntual que no hay argumento que rebata lo expuesto. Filosas y peleadoras, pero tan sensibles, que sino desbordamos de ira desbordamos en lágrimas o las dos cosas a la vez. Estar indispuesta es tener agudizados los sentidos.

Dispuesta a cocinar rico, a meditar profundo y a concederme los placeres de esta vida. Quiero mimos, (de los que me gustan), abrazos (en la medida justa) , chocolates que me pongan bien.
Una ducha larguisima, una buena crema por todo el cuerpo, tirarme panza arriba en la cama y quejarme del dolor de ovarios, con un toque morboso de satisfacción. Dispuesta a hacer el amor.

Dicen que el sexo alivia los dolores y en estos casos... lo mejor es no quedarse con las dudas.


Vos, para qué estás in/dispuesta?

Día uno.

Me vino.
Me cae. Me duele. Me gusta.
Estoy cansada y tengo excusa.
Quiero que vos lo entiendas,
que el colectivero me espere, que el del primer asiento lo ceda.
Hace calor, me hincho.
El mundo corre más rápido que de costumbre, yo levito.
Los miro pasar y por adentro río.
Son tontos, no saben lo que hacen.
Para que corren. Yo también corro.
Pero los veo desde afuera y no los comprendo.
Me detengo en un punto. No estoy adentro.
Si, estoy dentro y estoy fuera.
Afuera pero lejos.
En ese punto donde siento, pienso, veo.
Los odios son más odios, los sueños son más sueños.
Te odio. Te sueño.
Compro un chocolate y me elevo.
Lo abro lentamente, lo huelo
Lo aplasto con el paladar y la lengua.
Es mío, lo gozo, lo como, lo muerdo.
Sabor a revancha
Sos mío.
Te llevo.

"Historia Natural" de Plinio el Viejo.

“La proximidad de una mujer en este estado hace agriar el mosto;
a su contacto, los cereales se convierten en estériles, los injertos mueren,
las plantas de los jardines se secan, los frutos de los árboles
donde ella está sentada caen; el resplandor de los espejos
se enturbian nada más que por su mirada; el filo del acero
se debilita, el brillo del marfil desaparece, los enjambres
de abejas mueren; incluso el bronce y el hierro se oxidan
inmediatamente y el bronce toma un olor espantoso; en fin,
la rabia le entra a los perros que prueban de dicho líquido
y su mordedura inocula un veneno sin remedio."

Plinio (Hist. Nat., VII, numerales 64-66).

¿Qué es esto? ¿Qué somos? ¿Qué hacemos?

M-roja es un espacio para hablar sin preconceptos de la menstruación.

En tiempos de matriarcado se la consideró sagrada y mítica.
Sinónimo de potencia. Energía, magia.
Luego fue maldita y repudiada.
Convertía a las mujeres en impuras, indeseables y sucias.
Las llamaban brujas, las quemaban.
Ciento de mujeres aisladas y discriminadas por sangrar sin herida.

¿Qué nos sugiere hoy la menstruación?

Esta es la pregunta que lleva a desandar caminos, mitos y supuestos. El punto de partida para iniciar un recorrido donde lo que cuenta, no es la respuesta; sino la capacidad de preguntar; de preguntarnos…

Cómo postulado se plantea solo uno: “No dar nada por sentado”.

El objeto de estudio: la sangre menstrual.

Nos dejamos guiar por ella para abrir tantas puertas como nos proponga la curiosidad.

Mujeres, de distintas edades, orígenes y oficios cuentan su experiencia.
Charlas que comienzan tímidas o indiferentes, terminan enredándose en laberintos que sugieren mirar al mundo con un sexto sentido.

La menstruación hace de guía y en el trayecto se desatan emociones, broncas y angustias. El relato de cada una, se convierte en la voz de todas, se universaliza y la conversación va develando una trama sutil…

“…Menstruación, pulsión interna, ciclo lunar.
Menstruación, sincronía con mujeres de tu entorno.
Menstruación, posibilidad de crear…”

M-Roja es menstruación, una invitación para observar y hacer visible
algo que hoy se oculta bajo la indiferencia.